De acuerdo con eDigital Research, uno de cada diez turistas espera poder comunicarse con un representante de la marca a través las redes sociales. Por tanto, invertir tiempo y dinero en políticas adecuadas en redes sociales en el sector turístico y hotelero está demostrando sus beneficios dado que contribuye al aumento de la satisfacción del cliente, y también deja una huella reconocible en Internet, puente para mejorar el reconocimiento social, la reputación corporativa, la marca y, como es natural, el retorno de la inversión.

Viajar en 2018 montado en Internet deviene experiencia fluida y continua entre dispositivos, para fomentar el engagement de los viajeros y recopilar información relevante a través de las redes sociales, que funcionarán como canales de servicio al cliente en tiempo real y permitirán entender mejor sus necesidades potenciales, al tiempo que dará lugar a productos y servicios personalizados, únicos.

Para muchos especialistas, el reto principal es el de "mantener una experiencia de marca continua y fluida en todos los dispositivos" que garantice el compromiso de los clientes y aproveche al máximo la tendencia de reservas de última hora a través del móvil, con el objetivo de aumentar el potencial de crosselling (venta cruzada) y upselling (induce al cliente a comprar productos más caros) de este tipo de dispositivos.

El feedback (retroalimentación) con el cliente, así como compartir contenido de calidad, son factores clave, pues la información generada en las redes sociales desempeñará vital durante el proceso de planificación del viaje, partiendo de que las redes sociales influirán cada vez más sobre la decisión de los viajeros sobre dónde ir de vacaciones.

Optimizar las páginas Web de hoteles, incluyendo motores de reserva sencillos e interfaces usables; establecer una estrategia integrada en metabuscadores y de geo-targeting para ganar visibilidad frente a las agencias de viajes online; usar las redes sociales y aplicaciones móviles como una extensión de los CRMs de los hoteles para así interactuar de forma rápida y personal con los viajeros; recoger y clasificar el Big Data de los clientes para ofrecer el producto perfecto al usuario adecuado en el momento idóneo, y servicios en destino a través de conserjes virtuales

Viajar en 2018 montado en Internet es una verdad apelando a estas recomendaciones a las que usted, desde su casa, auto o centro de trabajo, puede acceder fácilmente.